La semana pasada una familia rumana recogieron 4 bebecitos de un arroyo donde estaban más solos que la una.
Estuvieron 3 horas esperando a ver si aparecia su mamá y nada... suponemos que los tiró allí algún indeseable porque ya no los quería.
Los tuvieron en una terraza, con un plato de leche (ya podrida) con pan... Les suplicaron que los tuvieran al menos hasta el domingo para que les pudieran buscar hogar de acogida pero al día siguiente, cuando había encontrado unas buenas casas para ellos, ya habían dado a dos, y no sabemos a quien ni nada.
Ahora queda una de las hembritas que se ha salvado, de unas 4 semanas, parece cruce de pequinés, pelo semilargo, regordeta y superespabilada. No llegará ni a 1 Kg de peso. Le están rompiendo ahora los dientecillos y ya come su pienso seco.
Busco un buen hogar para ella, no da un ruido y no ha extrañado nada llegar a una casa desconocida, incluso duerme las noches de un tirón. Es juguetona y un poco glotona.
Seguro que pronto encuentra a su ángel que la quiera y que no la tire como si fuera un despojo.
Si te interesa Mika escribe un mail a elarcadenoecordoba@gmail.com
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